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7/26/2007
día 4
 En tiempo real, hubiera dormido toda la tarde. De qué vamos a conversar si ya conocemos todo. Me quedé sentado a las 7 de la tarde en mi escritorio bailando con la cabeza, viste, pensando en lo bien invisible que hubiera estado bueno ser. La he llamado por teléfono, y expuse el cuadro tal como estaba hoy por la tarde. La cocina seguía atestándose de personas en busca de su capuccino, y yo le hablaba a lo tonto x mientras, sin que me interesara si me escuchaban las mujeres que estaban dando vueltas, haciendo como que no escuchaban. Las mujeres pueden escuchar el silencio mejor que cualquiera. Yo no se dónde diablos aprendieron ese arte que no es parte de nos los varoncitos representantes del pueblo del machito reunidos en congreso ingeneral. No más revoluciones. Nos pasamos varias veces, yo me pasé, y de pasado quedé como un tonto, casi en cero y en serio. Sigo revolviendo las 4 que le puse al café: "No te ofendas, pero a los 26 uno suele hacer estas boludeces..." Sabias palabras que amargan el sorbo corto. Rola y su corbata verde feo tienen razón. Igual me autodeclaro un 5% más feliz que el año pasado, y un 10% más feliz en generala. Yo saqué dos generalas seguidas una vez. Todavía estoy pagando por eso, porque no me invitaron más. Las cosas van bien hasta que empiezan a ir demasiado bien. No significa nada. Es este celular de mierda. Molesta cuando suena, y cuando no lo hace, también. Las cosas son así. Mis días son tan diluídos que no tengo siquiera que tomarme la molestia de ponerme ni guantes ni casco antes de empezarlos. La mayoría de las drogas legales resuelven los vacíos y la mayoría de los gestos reales siguen llenando los llenos. Hay más de 200 oficinistas acá que toman estas cosas, sería bueno que a estas alturas, alguna viniera con sabor a menta. off the record @ 19:39 ˆ |
